Saturday, January 20, 2007

Lost in Translation

Lost in Transaltion (Perdidos en Tokio)
Por: Tania Uribe
Dirección y guión: Sofia Coppola
Producción: Francis Ford Coppola y Sofia Coppola
Actuaciones: Scarlett Johansson, Hill Murria, Giovanni Ribisi,
Fotografía: Lance Acord
Música: Kevin Shields
EUA/Japón, 2003


La mayoría de las veces lo sencillo tiende a brindarnos mucha mas satisfacción que lo complicado. El ser humano tiende a complicarse demasiado las acciones de su vida pensando que así, las consecuencias serán mucho más fructíferas y placenteras. Este ejemplo lo aplico al cine, y es que muchas veces una película sencilla, pero bien manejada, da resultados fascinantes, atrapándonos en su historia. Lost In Translation es un ejemplo de esto. La historia es sencilla: Bob Harris, un actor americano que visita la ciudad de Tokio donde fue contratado para filmar comerciales de una bebida, y Charlotte, la joven esposa de un fotógrafo profesional, dedicado casi todo el tiempo a su trabajo, dejando en la vida de Charlotte un vacío. Las dos historias se conectan, ya que Bob Y Charlotte se encuentran hospedados en el mismo hotel. A pesar de estar rodeados de millones de personas, los dos se sienten completamente solos. Charlotte, por un lado, trata de buscar su lugar en el mundo, mientras Bob trata de encontrar un lugar en su vida monótona a lado de su esposa. Separados y a la vez juntos, Bob y Charlotte experimentan una enorme confusión debido a las diferencias culturales y de lenguaje que existen entre ellos y los japoneses. Se dan cuenta que por no compartir la misma cultura ni el mismo lenguaje, no pertenecen a este mundo, hay una barrera que no les permite poder interactuar. La barrera se rompe cuando los dos se conocen y pueden platicar e identificarse con su misma cultura y con ellos mismos. Es aquí cuando la historia arranca con más fuerza, viendo como los dos ya pueden interactuar con la cultura de los japoneses, teniéndose el uno al lado del otro, sintiéndose mucho mas seguros por la misma identidad que se ofrecen recíprocamente.
Sofia Coppola nos ofrece una historia bien contada que también nos propone reflexionar sobre ese momento en el que alguna vez nos hemos sentido así, SOLOS, a pesar de todos los que nos rodean, tratándonos de encontrar para así poder interactuar en el mundo. La película además nos propone que los idiomas construyen mundos distintos entre cada cultura y mientras no lo sepas hablar, no eres parte de éste.
Finalmente, a medida que su relación se hace más profunda, se dan cuenta que en algún momento se tendrán que alejar ya que su visita a Japón está por terminar, aunque el final nos deja con un gran signo de interrogación: ¿realmente se separan?

by frag

Escrito publicado en la Chakota enero / febrero

2 comments:

EL GUARDIÁN said...

Gran película. La tengo en mi top de favoritas. No sabes en qué nivel.
Chido post.

José Ignacio said...

Hola Tania:
Soy con el que estábamos ubicados en una misma noche, en el mismo lugar en la condesa con nuestra amiga Adriana jaja...
Vi el anuncio de tu blog en Facebook y enseguida me di una vuelta. He querido dejarte un comentario porque me gusta mucho y aprovecho principalmente esta entrada porque es por una película que considero esencial.

Además de lo que dices, creo que una cosa fascinante de la película es la sola indefinición de la relación entre Charlotte y Bob. Japón es, a mis ojos, sólo la excusa para que dos personas rompieran los roles, rutinas y convenciones sociales de su país de origen para aventurarse a experimentar juntos lo nuevo. ¿Es una relación platónica? ¿Es una relación filial? ¿Es una relación paternal? ¿Es el preludio a un romance a todas luces conflictivo? ¿Es todo y nada?
Creo que la película sólo retrata un momento en el que dos personas se tocan antes de que les pongamos una espantosa (¿o necesaria?) etiqueta a la relación que están sosteniendo. ¿Esa etiqueta hubiera sido más fácil de poner si la película nos ofreciera un día más de los personajes en Tokio? Eso es lo fascinante del final para mí.

Muchas felicidades por tu blog, y tienes un lector más.
Saludos y espero volvamos a coincidir pero con mayor calidad de tiempo con la amiga Adriana.